domingo, 21 de enero de 2007

El cargadero de mineral de Dícido

El vestigio minero si no más importante, más evidente del pasado minero de Castro Urdiales está situado en Mioño. Es el último superviviente de al menos siete cargaderos que existierón en la costa del municipio del tipo "cantilever", palabra inglesa que significa voladizo. Esta denominación se debe a que los cargaderos construidos hasta ese momento estaban apoyados sobre pilotes metálicos, mientras que los "cantilever" se construyeron a modo de una gran viga volada sobre el mar.

De esta manera los barcos podían cargarse en zonas de mayor calado y la estructura del cargadero estaba a salvo de los temporales y de la acción corrosiva del agua del mar.

El cargadero inicial, que no corresponde con el existente en la actualidad, fue construido en el año de 1896, para sustituir un cargadero sobre pilotes arrasado en el año 1894. El proyecto fue realizado por T.Seyrig, un colaborador de Eiffel y la construcción la llevó a cabo la compañía belga J.L. Lecocq, la misma que realizó el cargadero de Saltacaballo.









Este cargadero tenía dos pisos para la circulación de vagones, con doble vía cada uno. Cada piso terminaba en una tolva, superpuesta una con la otra de manera que alimentaban a la misma vertedera. Se podían cargar 200 tn por hora con este sistema. El el año 1929 se instala una cinta tipo Robins para el transporte del mineral.



El 23 de agosto de 1937 el cargadero es dinamintado por las tropas republicanas en su retirada, quedando en pie únicamente el pilar de mampostería central.




Inmediatamente se encarga la construcción de un nuevo cargadero a las compañías Basconia y Cortazar Hnos, según un proyecto de la oficina técnica de Altos Hornos, dueña de la explotación de Dícido en aquel tiempo. El cargadero reconstruido mantuvo las características del anterior, aunque con varias diferencias: solo tenía una plataforma para una cinta transportadora, situada a la altura del 2º piso del cargadero anterior, por lo que hubo que recrecer la pila central hasta dicha altura. Por la misma razón, la estructura necesaria era más ligera, disminuyendo el número de montantes y diagonales respecto al cargadero anterior. Se termino en junio de 1938 y se inauguró el 14 de julio.



En el año 1996 es declarado Bien de Interés Cultural, y aún hoy sigue a la espera de una merecida rehabilitación.

Fuentes: "La Ilustración de Castro";"La Cuenca Minera Vizcaína";http://www.muchocastro.com

1 comentario:

km130 dijo...

Excelente Blog. Buen trabajo de identificación de restos sobre los trazados actuales. ¿No va a continuar?

Un saludo

Armando